En lo que representa un “respiro” temporal para los migrantes que ayer recibieron una pésima noticia al saber que Texas consideraría delito estatal el cruce de la frontera México-Estados Unidos y además que autoridades policiales tendrían la facultad de detenerlos por el simple hecho de considerarlos “sospechosos”, una Corte de Apelaciones determinó suspender la controversial Ley de Inmigración.
Un panel de tres jueces de la Corte de apelaciones del Quinto Circuito de Estados Unidos dijo que votó 2-1 para anular un fallo anterior de un panel diferente que había puesto temporalmente en vigor la ley, la SB 4, que condenaba y perseguía sin piedad a los migrantes.
La discusión legal sobre la aplicación de esta ley -que mucho, incluyendo el Presidente de Estados Unidos- han considerado fuera de la Constitución estadounidense, aún no termina y además permite a los jueces estatales ordenar la deportación de inmigrantes, siendo que la aplicación de la Ley de inmigración, en general, es una función del gobierno federal.
A los migrantes podrían dictárseles sentencias de hasta 20 años de prisión si se niegan a regresar a sus países de origen, y además, con una simple sospecha de que las personas ingresaron de forma ilegal al territorio estadounidense, los policías podrían ejecutar detenciones en su contra.
